En la Mixteca, Oaxaca; desplazados por la violencia «claman» alimentos
Juana García / El Universal
Un centenar de personas, entre niños y personas de la tercera edad que permanecen en las instalaciones del Instituto Nacional de Pueblos de Indígenas (INPI), denuncian la falta de alimentos en las últimas semanas, tras cumplirse tres meses de desplazamiento forzado en Ndoyonoyuji.
Este fin de semana se cumplen tres meses desde que decenas de familias huyeron y abandonaron sus casas por conflictos en las comunidades de Mier y Terán, Guerrero Grande y Ndoyonoyuji, en el municipio de San Esteban Atatlahuca, sin que hasta el momento las autoridades garanticen su retorno.
Tres semanas después de los ataques en Guerrero Grande, al menos 75 familias regresaron a su comunidad, a un albergue improvisado en la agencia municipal, porque sus viviendas fueron incendiadas los días 21, 22 y 23 de octubre; sin embargo, las familias de Ndoyonoyuji continúan en las instalaciones del INPI.