La corrupción es la sombra que persigue al candidato a la gubernatura del Estado de Oaxaca por el PRI y PRD, Alejandro Avilés Álvarez, a través de su equipo de campaña, conformado por ex funcionarios con señalamientos de malos trabajos al frente de dependencias de gobierno y reprobados por la ciudadanía.
Y es que en la coordinación de la campaña con la que quieren «llevar al triunfo», a Avilés, se encuentran personas «nefastas» responsables de la marginación, la pobreza, corrupción y el estancamiento de la entidad.
El primer nombre que suena es el de el Coordinador de activismo político, David Mayren Carrasco, personaje que ha dañado el desarrollo de Oaxaca. Es el responsable de convertir a Caminos y Aeropistas de Oaxaca (CAO), en una agencia para beneficiar a familiares y amigos con obras carreteras.
Mayren Carrasco, es el causante de la pésima situación en la cual se encuentran los caminos y carreteras interestatales, situación que ha ocasionado accidentes mortales en diversas regiones del la entidad.
También brilla con su negro actuar Héctor Pablo Ramírez Puga Leyva, designado Coordinador de vinculación social, y quien en su último cargo como director de la Comisión Estatal del Agua en la administración de Alejandro Murat, cometió diversas anomalías que reflejaron en obras inconclusas y de pésima calidad en diversas regiones de la entidad.
Sólo basta con señalar la obra millonaria de agua potable realizada en Tuxtepec, misma que dejó hecha «un cochinero», y que por si fuera poco, se quedo a medias porque «el recurso original no alcanzó» para terminar el proyecto original.
Otro es Marco Antonio Hernández Cuevas, fue señalado por cometer irregularidades al frente de la Coordinación General de Atención Regional en la actual administración, mole fue el saturación por millones de pesos empresas fantasmas.