El Gobierno de la República reveló que la desaparición de la abogada Mixe Sandra Domínguez, está relacionada a un grupo delictivo, y no a temas de venganza, cuestión de género o crimen de Estado. Se equivocaron las feministas.
Durante la mañanera del pueblo de la presidenta Claudia Sheinbaum, el secretario de Seguridad Omar García confirmó que hay avances en esta investigación:
«La fiscalía del Estado tiene a una persona detenida que tenía el teléfono de una de las víctimas, estamos ayudando en la investigación la cual sí apunta a un grupo delictivo», dijo.
Y abundó, «según el objetivo de la desaparición no era ella, si no su pareja sentimental que estaba vinculada a un grupo delictivo».
Sandra y Alexander fueron vistos por última vez en su domicilio en María Lombardo de Caso, municipio de San Juan Cotzocón, ubicado en el sureño estado mexicano de Oaxaca, el 4 de octubre de 2024.
Días después «presuntas faministas» intentaron adjudicar la desaparición como un «crimen de estado» por parte del Gobierno de Salomón Jara, o un delito de género.
Asimismo, diputados y dirigentes sociales comenzaron a abanderar el tema con fines políticos: pero ni uno sin aportar bases solidas para reforzar la investigación respectiva.